sábado, 4 de febrero de 2017

UN POEMA AMBIENTALISTA EN EL ANIVERSARIO DE SAN MARTÍN DE LOS ANDES


"LOS MANZANOS" poema de MIGUEL A. CAMINO


Somos muy pocos

           los pobladores.

Si más vinieran,

           ¡pobres montañas!

¡pobre veguitas!

          Ni los fresales

 ya existirían;

           las sementeras

 los matarían.

          La bestia humana

 por cada mata

          que ufana siembra

o que trasplanta,

           miles arranca,

miles marchita.

           Ya sus manzanos

 no se renuevan

          ni por chupones

ni por semillas.

        Solo sus troncos,

de seculares

         aún resisten

el rudo avance;

          y poco a poco

van sucumbiendo,

          estrangulados

por la maraña


de ramas muertas

          que los agosta

y los inclina.

          Nadie los poda,

nadie los cuida.

          todos desean

que llegue el día

          de la cosecha.

Mas, no lo esperan;

          no están pintonas

aun las manzanas,

          y la canalla

con gruesos palos,

          cañas y piedras

baja con golpes

          los verdes frutos;

destroza gajos,

        gajos enormes

llenos de yemas,

         bellas promesas

de lo futuro;

         y la maraña

mas se entreteje,

         y los manzanos

se desarraigan y palidecen.

        Nadie vigila,

Nadie protege
         esas bellezas;

y todo el mundo

          chicos y grandes

se consideran

           dueños de ellas.

De ahí la lucha

             sorda y aleve

que se establece

            por apropiarse

unos y otros,

            antes que nadie,

de sus riquezas;

           y los destrozos,

incalculables

            e irremediables,

que ocasionan

          con su torpeza.

Así este trozo

         de patria mía,

de selva virgen

          que fuera un día,

perderá pronto

          su lozanía

y de sus bosques

          y sus manzanos

todo el caudal,

         si no se acude

en su defensa,

          se cicatriza

 su ancha herida,

          y no se aplica

con mano enérgica

          remedio al mal.

Y aun, asimismo,

          vendrá el colono

con sus arados…

         Adios, fresales!

Adios radales!

         Adios, michays!

Vendrá el ricacho

          con sus jardines

y sus injertos,

          y, poco a poco,

por renovarlos,

          por ser ya viejos,

o porque estorban

          a su automóvil…

Adios, manzanos!

          Los cortarán.


Por eso quiero

          que mis cantares,

libres de inútil

           palabrerío,

digan que aun lucen

          estos lugares

sus joyas propias

          y naturales;

y si algún día

         desaparecen,

queden mis versos

          como testigos,

como un recuerdo

         de sus pasadas

esplendideces.

                                                                                                        El Autor de este premonitorio poema: Miguel Andrés Camino fue reconocido por el puebo de la ciudad como “El poeta de san Martín de los Andes.

Una calle, en la costa del lago Lacar, al cual también le cantó, lleva su nombre.

Así mismo un aula de la Escuela Provincial Nro. 142 y una sala de la Biblioteca Popular Nueve de Julio.

En este 119 aniversario de San Martín de los Andes, desde este  blog, humildemente adherimos a la fecha con este bello poema de nuestro poeta.