domingo, 28 de febrero de 2010

56 años pasaron


Cincuenta y seis años con el dolor oculto, con el amor oculto, con la espina en carne viva. Y nos volvimos a ver, no sabíamos ni abrazarnos, no pudimos llorar. Toda la vida con la pregunta: ¿ella me amará todavía?

Entre los mates recordamos algunas naderías, sin bajar la guardia, sin mostrar la lágrima, con la sonrisa que parecía tristeza. La salud, los nietos, los amigos que partieron, los viejos queridos que ya no están. Te presto estas fotografías y mi viejo álbum azul-creo que en nuestro tiempo eran todos de ese color-seguramente no lo recordarás, me dedicaste una poesía que me hizo llorar yo tenía catorce, si no podés volver me lo mandás.

Mirando sin ver anduve unos kilómetros, estacioné junto a unos sauces, con lentitud de caricia abrí el sobre bolsa, las fotografías me golpearon, con estilográfica y con errores encontré mi poema subliminado de amor, disfrazado inútilmente; aun no podía llorar. En la última hoja encontré la respuesta, con su letra pequeña y sin fecha ella había escrito:

La fuente de alegría

Tu me dirás después, quizá algún día

ante esta singular sonrisa mía:

-¿Estás contenta?...te creía triste

y mi voz te dirá serena y pía:

-La dulce pena eterna que me diste

esa...ha sido mi fuente de alegría.

Posta Posta.

Cacho de tango

viernes, 19 de febrero de 2010

Siete cartas de amor.

carta segunda.

Como dos generales solos,

sin soldados, solos.

Como dos lenguas diferentes,

como un pan y una tijera,

como un yunque y una rosa.

Nunca tendremos como otros

un dia de mirar fotografías

con lluvia y tortas fritas.

Tiran electroimanes, cadenas

a galxias insalvables,

insultos, vidrios, sollozos,

para un amor y dos pirañas.

Proyecto carcomido

por la lejía de un querer

extraño. ¿Te extraño?

Extraño tu peligrosa candidez

de hongo.

Nos hicimos pelota, pero,

vale saber que hace mucho

fuimos clavel y rosa,

hoy dos puchos.

Cacho de tango

jueves, 18 de febrero de 2010

PERSONAJES DE MI PUEBLO


Yaco Comin es Médico Veterinario. Nacido en Junín provincia de Buenos Aires, realizó sus estudios universitarios en la Universidad Nacional de La Plata. Es el primer Veterinario civil que llegó a SanMartín de los Andes, su matrícula provincial es 09, eso nos indica su pertenencia a estas tierras, 34 años. Es nuestro personaje elegido por ser una persona que ama incondicionalmente a San Martín de los Andes, su entrega apasionada a la profesión, su calidez para con la gente sencilla del campo , con los pobladores de pueblos originarios y pioneros. Fue Director de Bromatología e Higiene de la Municipalidad de San Martín de los Andes, Concejal en épocas del Ingeniero Fontanive como Intendente, colaborador de Bomberos Voluntarios y habitante orgulloso del Barrio El Arenal, donde supo criar a su hijo en medio de plantas, muchos perros , gatos y asados con los amigos, Su Veterinaria El Labrador, de más de treinta años de existencia fue llamada “La jabonería de Vieytes” debido a las reuniones , que mate por medio, llevaban a cabo los más variopintos personajes del pueblo, ricos, pobres, destacados turistas, extranjeros, nativos etc. Ahí se discutían los hechos políticos, las anécdotas locales, las alegrías y tristezas de este pueblo. Con la globalización, el vértigo por el tener más que el ser, con la ausencia de algunos amigos, se fueron perdiendo algo de esas tertulias, pero algo no más. Siempre que esté su presencia, por la magia de su calidez humana, habrá gente que buscará sus servicios y su sonrisa de bienvenida, así como las palomas y los perros que van en busca de comida, sabiendo que nunca les será negada. Hoy dieciocho de Febrero, día de su cumpleaños lo felicitamos y agradecemos que sea nuestro vecino.***

Un cuento de : Ana María Manceda



Publicado en "Arte y Letras" Revista de cultura-Moreno Pcia. de Buenos Aires

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Perfumes lejanos

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....Tú tienes la forma de una fuente no de agua sino de tiempo

En lo alto del chorro de la fuente saltan mis pedazos

el fui, el soy, el no soy todavía, mi vida no pesa

El pasado se adelgaza. El futuro es un poco de agua en tus ojos

"Trowbridge Street” Octavio Paz.


I

No sentí que fracasé, pero debía hurgar, buscar en mi mente el origen de esa explosión que no me permitió seguir con la lectura del poema. El público aplaudió cálido, como apoyando esa emoción... Y sí, siempre me perseguirá la nostalgia, sello justificado, es la vida que me tocó. Más de una vez, mientras cae la nieve y sopla el viento desde el Pacífico, me he preguntado ¿ Qué hago acá, en la Patagonia?

Le contaba que salimos temprano de la escuela por el eclipse de sol, todos nos asustamos, hasta los pájaros, porque el día se hizo de noche. La abuela Rosario , con su mirada de tierra oscura de musgos, velada por el desarraigo, me miraba, mientras revolvía en la olla de hierro, traída desde su tierra subtropical, los chicharrones de la pella de grasa vacuna. Su amor brotaba en la gran cocina de la casa platense, desde sus manos mágicas, mientras esculpía esas comidas de sabor profundo, misterioso del noroeste. Habían comenzado los preparativos para la fiesta de mi “Primera Comunión” y no faltaría nadie, las empanadas de la abuela eran famosas desde el Bosque hasta la entrada de La Plata. Era la época en la que en una cuadra habitaban italianos, españoles, brasileños, norteños como nosotros y aún una familia japonesa. Era una época en las que los aromas de comidas exóticas y criollas se mezclaban con el olor a pasto recién cortado, el perfume de los jazmines del cabo y el olor al Río De La Plata que traía el viento del este. Era una época en la cual los viejos vivían con sus familias y las bibliotecas de los clubes de barrio eran santuarios para los pibes y leer era un escudo de nobleza. En las fiestas patrias se escuchaban zambas y pasodobles y a todo los inmigrantes nos unía el mate y el asado. Pero las empanadas de la abuela son inolvidables. Los preparativos hasta el momento de hincarles el diente duraban tres días.

Al día siguiente se colaban los chicharrones para separarlos de la grasa caliente, cuyo futuro serían las tortillas de grasa - Comé hijita, comé, estás muy delgada, se persignaba, cuando venís se te ven solo los ojos, y así una se volvía gordita y saludable. Luego preparaba la masa, una vez lista se formaban los “pupos”, tarea en la que yo ayudaba- Así Nóe , deben quedar bien redonditas. Me encantaba darle esa forma redonda a la suave pasta y luego hundirle un dedo en el medio. Estirados con el palo serían las tapas para el relleno. Mientras tanto en una gran olla, mi madre hervía en la cocina la gallina elegida por la abuela del superpoblado gallinero. Una vez cocida se picaba la gallina y carne vacuna cruda, a mano y con un cuchillo afilado para el caso. El caldo que quedaba era tomado como una ceremonia, debíamos estar bien alimentados, según la abuela los pueblos antiguos lo valoraban por las ricas sustancias que hacían más fuertes a su gente, yo no entendía mucho, pero me gustaba, la prefería al horrible hígado de bacalao que me daban cuando empezaban las clases. (Continuará)

domingo, 14 de febrero de 2010

Por Mario Benedetti


Luna congelada

Con esta soledad
alevosa
tranquila
con esta soledad
de sagradas goteras
de lejanos aullidos
de monstruos de silencio
de recuerdos al firme
de luna congelada
de noche para otros
de ojos bien abiertos

con esta soledad
inservible
vacía

se puede algunas veces
entender
el amor.

El celaje

¿Adónde fuiste, Amor, adónde fuiste?
Se extinguió en el poniente el manso fuego,
y tú, que me decías: "hasta luego,
volveré por la noche"... ¡no volviste!

¿En qué zarzas tu pie divino heriste?
¿Qué muro cruel te ensordeció a mi ruego?
¿Qué nieve supo congelar tu apego
y a tu memoria hurtar mi imagen triste?

...Amor, ¡ya no vendrás! En vano, ansioso,
de mi balcón atalayando vivo
el campo verde y el confín brumoso;

y me finge un celaje fugitivo
nave de luz en que, al final reposo,
va tu dulce fantasma pensativo.

Autor: Amado Nerevo

jueves, 11 de febrero de 2010

Siete Cartas de Amor.........Jorge Carucci


Carta primera

Me quedan migas de vos
y una pollera azúl,
algunas maldiciones,
una pastalinda, un misal.
No puedo abrir mi cajón
de culpas, ni quiero
"ahogar con cuatro copas
lo que pudo ser tu amor.
La pava y el mate
me acercan el nogal,
Tomás (mi perro)
me sigue cauteloso,
Gardelito ,el zorzal,
anda en la suya
y yo...qué sé yo...
voy a meter todo
en el lavarropas,
o en el crematorio.
Hoy en la maleza hallé
aquel aro que perdiste.
Cacho Carucci

viernes, 5 de febrero de 2010


DIARIO-JUNIO
No nací cuando florecen los manzanos,
yo no llegué en tiempos de cosecha,
me asomé en el junio aletargado,
cuando el que poda afila las tijeras,
cuando limpian acequias y canales,
cuando el hacha derriba la alameda,
cuando duermen viñedos y frutales.
Y sigo en junio,después de tantos junios
con algunas certezas en la espera.
Hoy aquí,donde estuvo el Paraíso,
tras un prolijo balance de la vida,
lejos del valle natal de Rio Negro,
veo caer la nieve en este junio,
en este junio casi triste como uno.
Cacho de tango. (escrita en algún junio, hace un toco)

martes, 2 de febrero de 2010

VIAJE

VIAJE





Cordillera
meseta mar
ancho territorio

rutas caminos pueblos
valles cordilleranos
valle alto, medio y bajo
Limay, Neuquén, Negro: ríos.

Gente paisajes familia encuentros
recuerdos afectos
lejana infancia
madurez presente.

Reuniones recuerdos compartidos
saludos despedidas
compromiso
futuros encuentros.

Línea sur asfalto ripio asfalto
cordillera otra vez
En casa.